La Fiesta del Fuego en Santiago de Cuba es una explosión de música, color y alegría, con rituales de fuego y música electrónica tocada por los mejores DJ. Santiago es conocida por ser la capital de la fiesta de Cuba, especialmente durante el verano. La Fiesta del Fuego se celebra anualmente a principios de julio. Incluye una serie de actuaciones, exposiciones y celebraciones callejeras con enfoque en la cultura caribeña. Los visitantes pueden unirse a los desfiles callejeros y a las congas tradicionales. Las calles están llenas de música y ritmos de baile.
El Desfile de la Serpiente
Cada año, el festival comienza con un magnífico desfile de apertura, que cuenta con delegaciones participantes de diferentes países caribeños y varios grupos de conga, como Los Ripiaos, Paso Franco, Monte Oscuro, Íreme, La Caridad, Pilón del Cauto, Los Hombres Carrozas y Barrancas. Cada delegación presenta a su país con música y baile. El desfile recorre la calle Aguilera, comenzando en la Plaza de Martes y terminando en el Parque Cespedes. El parque se convierte en el epicentro de la diversión, la música y el baile del carnaval.
Desfile de Fuego (Quema del Diablo)
La culminación de la Fiesta del Fuego es el Desfile de Fuego en la última noche. Rinde homenaje a la cultura y creencias tradicionales cubanas. El desfile comienza con un saludo ritual a Nzambi Congo, un dios supremo en la religión Palo Monte, y se completa con la quema de la estatua gigante del Diablo. La quema va acompañada de cientos de tambores. Miles de personas se reúnen en la Alameda Michaelson para presenciar el increíble final del Festival del Caribe. La quema de la efigie inflamable del Diablo simboliza la victoria del bien sobre el mal. El festival termina con una gran fiesta callejera en toda la ciudad.
Historia del Festival del Fuego
La Fiesta del Fuego se celebró por primera vez en 1981. Fue iniciada por el intelectual Joel James Figarola, fundador de la Casa del Caribe, una organización que promueve las tradiciones, la cultura y el medio ambiente del Caribe. Cada edición del festival está dedicada a un país diferente o a un grupo de países. El festival celebra las raíces africanas, los elementos tradicionales de la cultura caribeña y las prácticas religiosas. Una vibrante mezcla de culturas y naciones es un símbolo de Santiago de Cuba.
