Festival Abare 2024 en Japan
Este feroz festival de "fuego y violencia" incluye mucha destrucción, dedicada al Santuario Yasaka en Ushitsu de la Península de Noto.
Fechas: 5 y 6 de julio de 2024
El Festival Abare, también conocido como el Festival del Fuego y la Violencia, es una vibrante celebración japonesa que se celebra anualmente en Ushitsu, en la península de Noto. Dedicado al Santuario de Yasaka, conmemora la erradicación de una enfermedad contagiosa de la región a mediados del siglo XVII. Este evento violento y animado tiene lugar cada julio el primer viernes y sábado del mes, presentando rituales y ceremonias enérgicas que resaltan la resistencia histórica y las tradiciones culturales de la comunidad.
Celebraciones
El Abare Matsuri se desarrolla cada primer viernes y sábado de julio en Ushitsu, Noto, comenzando en el Santuario Yasaka con una solemne ceremonia sintoísta. El festival cobra vida caótica cuando los mikoshis portátiles y más de 40 faroles kiriko desfilan por la ciudad. Al anochecer, las altas antorchas de 7 metros arden, iluminando las calles entre el ritmo de los tambores taiko y la animada celebración.
En el segundo día, el festival se intensifica en un frenesí. El Mikoshi sufre una destrucción ritualística: arrojado al suelo, sumergido en el río y finalmente consumido por una fogata rugiente. Entre gritos y aplausos, doce hombres, vestidos con poca ropa, desmantelan vigorosamente el santuario, simbolizando la esencia del Festival "Fuego y Violencia". Más tarde, sacerdotes sintoístas inspeccionan los restos para confirmar la finalización ritual del Mikoshi antes de devolverlos con reverencia al Santuario Yasaka.
Orígenes del Festival Abare
El Abare Matsuri, o Festival del Fuego y la Violencia, comenzó hace 350 años en Noto, Ishikawa, durante un grave brote de peste. Los residentes buscaron la intervención divina de Gozu Tenno del Santuario Gion de Kioto. Después de las oraciones, una abeja picó a los enfermos, quienes posteriormente se recuperaron, visto como un signo de los dioses. Para conmemorar este evento milagroso, la comunidad comenzó a desfilar grandes carrozas kiriko. Hoy en día, el festival anual honra esta tradición, celebrando con gratitud y entretenimiento para la deidad en la que creen que intervino en su momento de necesidad.