El primer domingo después del 8 de mayo, los cardenales y obispos de Polonia se reúnen en Cracovia para honrar a. Stanislaw. Stanislaus de Szczepanów era un obispo de Cracovia conocido por su capacidad de resucitar a los muertos. Con el fin de demostrar al rey Boleslaw el audaz que tiene el derecho de poseer un pedazo de tierra, Stanislaw milagrosamente produjo un testigo apropiado. Pasó tres días en oración y fue al cementerio donde Piotr, el hombre que era el dueño anterior de la tierra había sido enterrado tres años antes. Stanisław pidió a Piotr que se levantara, y Piotr lo hizo. Cada año una procesión de fieles y celebridades, dirigida por el Obispo de Cracovia, va de la Catedral de Wawel al santuario de Skalka.