Los locales dicen que burčák es una parte esencial del otoño en la República Checa, especialmente en la región de Moravia del Sur. Los checos tienen una profunda relación con esta bebida de temporada Moravia, que se puede degustar en festivales de vino en todo el país. Aunque la gente de otros países europeos también produce y consume vino joven, los checos han mantenido un estatus para su bebida tradicional. El nombre «burčák» está protegido por la legislación de la UE, lo que significa que sólo el verdadero burčák se produce estrictamente a partir de uvas moravas o checas.
El proceso de hacer burčák es bastante sencillo. Durante la vendimia, el zumo recién exprimido se filtra y se hace libre de cualquier impureza. Después de tres a cuatro días de fermentación y cuando el balance de azúcar y alcohol es "justo", burčák está listo para el consumo. Es una bebida dulce, baja en alcohol (5-7%) de color amarillento o rosado. Dado que es fresco y todavía está fermentando, el vino joven debe consumirse muy rápidamente, dentro de uno o dos días después de la compra.
La temporada oficial de burčák va de mediados de agosto a finales de noviembre, para que puedas degustar esta bebida de otoño en uno de los Vinárna (bares de vino), Burčákomat (refrigerador de camiones que vende burčák), o en festivales de burčák
